19/5/09

Thomas Schmitt

Compro un juguete ambiguo, al uso del momento vital que atravesamos, un objeto de poder reversible. Es rosa, como todo el fondo de armario de nuestros secretos y pequeño. Su forma extraterrestre promete dar con tu punto G... y con el mío.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si deseas dejar un comentario, es bienvenido. Te anticipo, no obstante, que no contestaré por expreso deseo de la mujer a la que amo. Rara vez cuestiono lo que la hace feliz.