Semana extraña. Viajamos hasta la playa para reencontrar a tus sobrinas. Olvido de nosotros. Has estado nerviosa y frágil, mostrándome la cara más humana del eterno femenino. De vuelta a casa nos reencontramos en soledad, después de siete días.Me tocas, mecánicamente, te tocas, te sacias, me pides que me sacie...
Apenas siento tu mano reposando inerte sobre mi pecho. Tras una semana de espera y contención, de ofrenda y sacrificio, la ausencia de tu energía se hace insoportable. Aprendo que las mujeres pueden fingir los orgasmos cuando es necesario, pero no la sed de posesión.
Esposada en Ahora me ves
Hace 10 años
muy bueno
ResponderEliminarmi gusta mucho de tu blog
ummmmmmmmmm
besitos
su blog es muy bueno ........
ResponderEliminarHola, tienes un blog muy bonito aqui.
ResponderEliminarSi quieres podemos intercambiar enlaces entre nuestros blogs.
Dejame sebare que te parece.
Saludos